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¿Cómo puedo no amarte?

Si la luna al brillar me hace recordarte.

Si el sol al calentar.

Semeja la caricia de tus manos.

Si el color del cielo refleja la pureza de nuestra vida.

Si la suavidad de las flores al rozarme.

Son iguales a tu boca al besarme.

¿Cómo puedo no amarte?

Si me diste todo de ti.

Si a tu lado todo fue seguridad.

Si lees mis pensamientos.

Con solo mirarme un momento.

Mientras la luna no deje de brillar.

El sol siga calentando.

La suavidad de las flores siga igual.

Yo seguiré amándote.

De aquí a la eternidad.

Nunca creí amar tanto.

Nunca creí llegar a conocer el amor.

Yo que era inmune a heridas de amor.

Te entregue todo.

Todo lo que tenía para ganarme tu cariño.

Aposté la vida y me deje ganar.

Por ti dejé todo sin mirar atrás.

Te ame sin condición.

Fuiste todo para mí…

¿Y qué obtuve?

Dolor, lástima y compasión.

Has herido mi corazón.

Solo sé que ahora no me queda más que seguir adelante.

Una vez más jugaste con mis sentimientos.

Pero a pesar de todo te amo.

Aquí estoy.

Escribiéndole al viento todo aquello que quiero decirte a ti.

He inventado toda clase de pretextos para no quererte.

Mientras que tú al mismo tiempo intentabas hacer que te olvidara.

Con tus desprecios y humillaciones.

Hoy que ya no estás a mi lado y mirando las mismas estrellas se desbordan las fuentes de mis ojos formando así un río que al pasar por mi mente se lleva de a pocos tu imagen que me diste una vez.

Pero las lágrimas que derramo son lágrimas de amor.

Amor que alguna vez sentí por ti.

Siento como vuelven aparecer esas noches.

Esas noches en la que los dos nos mirábamos sin decir nada.

Nos sobraban palabras porque los dos sabíamos el afecto que teníamos uno del otro.

Y vuelvo a sentirlo porque te recuerdo.

Porque quisiera volver a tu lado.

Porque todo lo que me rodea me resulta insignificante si no estoy contigo.

Las cosas más hermosas se vuelven absurdas sin ti.

Tú lo has sido todo para mí y ahora sin saber como ha podido suceder te conviertes en mi ruina.

A veces pienso que exagero.

Que otro amor me envolverá y lograre olvidarte.

Cuando tengas ganas…

Cuando tengas ganas de besar cerraré mis labios.

Y no pensaré en los tuyos.

Ni en la inmensa sensación de desconsuelo.

Cuando quieras tomarte de las manos guardaré las mías.

Las cubriré del frió de tu ausencia.

Y no pensaré más en ti.

Cuando quieras soñar, contigo permaneceré despierto.

Soportando la madrugada.

Escribiendo prosas sin rumbo.

Sin principio ni fin.

Buscando un consuelo a esta soledad.

Cuando sin querer recuerde tu aroma.

Buscaré la montaña más alta.

Me refugiaré en ella durante años.

Hasta que el aire puro borré tu recuerdo de mi piel.

Cuando extrañé tu calor bajo las sábanas.

Cerraré mis ojos y me obligaré a dormir.

Pero… vuelvo a empezar.

Vuelvo a soñar con tu cuerpo junto a mí.

Y cuando quiera olvidarte volveré al inicio.

Regresaré el tiempo y evitaré conocerte.

Y esconderé mi cuerpo de tu cuerpo.

Hoy por fin lloraré mis años de soledad.

Cuando ya no este…

Cuando ya no este.

No sé si me vas a extrañar.

Pero yo lo haré.

No te voy a olvidar.

Me hiciste reír.

Una sonrisa profunda sacaste en mí.

Me hiciste llorar.

Me hiciste madurar.

Me ayudaste a crecer.

Por esos momentos especiales solo te quiero agradecer.

Durante mucho tiempo me diste momentos hermosos.

Nunca los voy a olvidar.

No peleemos…

No nos dejemos de hablar.

Quedemos como amigos y nada más.

Recuerdo el día que te conocí.

Fue tan especial esa noche.

Por tu culpa no dormí.

Me hiciste desvelar.

Pero ahora no duermo.

Y si pienso en ti.

Mi ilusión por ti continúa.

Aun sigo pensando que eres linda.

Espero poderte olvidar.

Pero no quedarás como un mal recuerdo lejano.

Siempre allí estarás.

Solo te escribía para saber como estabas y ver si aún no me dejabas de amar.

Caminando a media noche…

Caminando a media noche entre tanta obscuridad.

Te descubrí en el brillo de una estrella fugaz.

Ahora que te he encontrado.

No te pienso, ya dejar.

Eres mi paz, mi calma, eres mi realidad.

Gracias a ti, he llegado a la cima.

Y más halla, tú me has enseñado a querer y amar de verdad.

Cuan lejos ven mis ojos…

Cuan lejos ven mis ojos el cielo del mar.

En el horizonte observo.

Que se pretenden juntar.

De esa misma forma te ven mis ojos.

Lejos de mí.

Pero en una noche mágica.

Nuestros cuerpos.

Nuestros labios.

Y nuestro aroma.

Nos parecen fundir.

Hacemos cortas, las distancia largas.

Hacemos largos, los momentos nuestros.

Haces tuyo y yo hago mío nuestros cuerpos.

Tan solo con mirarnos.

Tan solo con tocarnos.

Tan solo con hablarnos.

Tan solo con amarnos.

Hoy hacemos un balance de amor.

Y ya somos, el uno para el otro.

Yo te extraño, tú me extrañas.

Yo te amo, tú me amas.

Porque creo en ti, como creo en Dios.

Porque creo en Dios, como creo en mi.

Corazón herido…

Corazón herido…

¿Cómo sanar un corazón herido?

Difícil cuando hay que explicarle.

Porque a pesar de tanto reír.

El siente un gran dolor.

Difícil cuando hay que explicarle.

A estos labios el tener que cantar.

Sintiendo el vació que dejaron los tuyos.

¿Cómo sanar un corazón herido?

Difícil como pedir que deje de llover.

Pero nunca imposible de conseguir.

Difícil sigue siendo el explicarle.

A mis ojos el permanecer abiertos.

Cuando frente a ellos no te encuentras.

¿Cómo sanar un corazón herido?

Difícil es… pero no imposible de conseguir.

¿Cómo decirte te quiero?

¿Cómo decirte te quiero?

Si no me escuchas más.

Cómo tocar tu piel tan suave.

Si conmigo no quieres estar.

Cómo decirte te extraño.

Si tu pensamiento ya no es mío.

Cómo ver el brillar de tus ojos.

Si tu mirada… en otro está.

¿Sabes?

¡Esto es un juego!

Juego de sentimiento y verdad.

Ya no estas más conmigo.

Te has ido para siempre.

Pero en mis recuerdos aún estas.

Quiero tocar tu mano.

Y sentir tu palpitar.

Quiero oír tu risa.

Quiero decir… te quiero.

Te amo y te extraño.

Y en mí siempre vivirás.

¡Te amo!

Cómo duele…

Cómo duele tu ausencia.

Me es difícil vivir sin tu amor.

Nada calma mi sed por tus besos.

Tengo mucho frío.

Ya no tengo tu calor.

Cómo duele tu ausencia.

No puedo calmar mi angustia de no tenerte.

No me resigno a la idea de perderte.

Creo enloquecer al no poder verte.

Cómo duele tu ausencia.

Cómo quisiera detener el tiempo.

Regresar hacia atrás.

Y junto a ti mi vida empezar.

Cuando te miré…

Cuando te miré por primera vez no sabía que decir, que pensar, ni mucho menos sabía que sentir.

No sé cómo…

Pero me enamoré de ti, antes de verte, antes de tocarte, después al tenerte tan cerca de mí, me enamoré mas de ti.

Me gustó como me hacías sentir tan completo, tan seguro, pero te fuiste tan rápido.

Me dejaste en soledad.

Solo tu voz me daba felicidad, al escuchar esas palabras que día a día desaparecieron.

Pero en mi corazón siempre estuvieron, más eso no me bastó.

Necesitaba escucharlas de ti.

Quizás en tu corazón dejaron de existir.

Quizás el destino o la distancia.

No lo sé.

Más todo terminó y quizás nunca volverás.

¿Fue mi culpa?

Sí…

Soy una persona impaciente.

No supe como esperar, mas creo que para el amor se necesitan dos.

Hoy me encuentro solo y triste.

Mi corazón sufre pero esto me permite continuar.

El dolor me hace más fuerte, me hace aprender.

No terminamos muy bien, pero quien dice que es el final.

La vida da muchas vueltas y quizás nuestros caminos se vuelvan a cruzar y si Dios quiere unir para volverlo a intentar…

¿Está en nosotros estar o no juntos?

Cuando me pongo a querer…

Cuando me pongo a querer evaluar lo profundo de mi amor por ti.

Jamás puedo llegar a un acuerdo entre mi mente y mi corazón.

Y por más que deseo llegar al fondo parece no existir.

Pues no hay ninguna medida que lo logre.

Me siento tan completo contigo que hasta creo sobrepasar los límites.

Contigo he descubierto lo que el verdadero amor significa.

Contigo he aprendido el valor de una caricia.

Contigo he sentido el más dulce de los besos.

Contigo he experimentado las más sublimes sensaciones.

Contigo me he sentido escuchado, amado… yo mismo.

Tanto que deseo vivir mi vida entera contigo y morir a tu lado.

De cada experiencia compartida he aprendido a amarte más.

Y en cada una de ellas sé que mi amor por ti va mucho más allá de la atracción física que siento por ti.

Va más allá de un beso o una caricia.

Va mucho más allá del contacto sexual.

Va más allá del sentirme protegido en tu compañía.

Va más allá de lo que puedo expresar.

Porque a pesar de que todo lo anterior lo vivo pleno contigo y lo disfruto de una manera maravillosa e inexplicable.

No se puede comparar con el éxtasis o la plenitud interior que obtengo cuando en nuestros encuentros me despierto junto a ti.

No se puede comparar con la satisfacción personal que me da el amarte y estar ahí para ti como tú para mí en la distancia.

En medio de todas esas llamadas donde las palabras nunca serán suficientes para expresar todo este amor.

Que aunque te interrumpa mil veces para decirte….

- Mi amor… te amo.

No siento que sean suficientes.

Nada se compara a la dicha.

A la felicidad.

A la tranquilidad que me brinda esta tremenda combinación de ternura.

De comprensión.

De amor.

De compatibilidad.

De conexión que entre nosotros existe.

Mi amor por ti va más allá…

Caminando por la playa…

Caminando por la playa en un atardecer tardío.

Yacía entre la arena una estrella de mar.

Brillaba con helados destellos.

La tomé entre mis manos.

Preguntándome en silencio…

- Estrella que provienes de aguas profundas.

- ¿Cómo es que llegaste a mí?

Ella, con muda voz, contestó…

- Provengo del cielo infinito.

- Y al precipitarme a la mar, rompí en mil misiones.

- Ahora en tus manos, cumplo la mía.

- Te prodigaré amor y cuidados.

- Te enseñaré la inmensidad del cielo.

- Y sabrás que el color de la mar, es el azul de tus sueños.

- Sentirás como el viento rompe en tus mejillas.

- Las soleadas arenas tornarán tu piel dorada.

- Y el brillo de tus ojos, en las marinas noches, podrán iluminar las playas.

Al sentirla mía, la estreché entre mis brazos.

Y la cubrí emocionado con gotas de agua salada.

Ya tengo la estrella del cielo.

Ya tengo mi estrella de mar.

Puedo colgarla en el infinito.

Y brilla lo mismo en la mar.

Cuando el amor se cruza...

Cuando el amor se cruza en el camino.

Nada ni nadie puede evitarlo.

Es más fuerte que cualquier cosa en el mundo.

Los lazos del amor son invisibles, inevitables e ineludibles.

Aunque trates de cambiar.

Aunque te aferres al pasado.

Aunque intentes no dejarlo entrar.

No sentirlo.

Ser indiferente con él.

Aunque le cierres las puertas.

Las sensaciones y la esencia del amor siempre pero siempre te persiguen aunque quieras mantener al margen tu mente.

Aun así, en los pensamientos te insiste, se asoma, te acosa.

La fuerza del amor es más grande y más fuerte que tú.

El amor nace en el corazón.

En tus pensamientos.

En tu piel.

Cuando menos lo esperas, lo imaginas, sin pensarlo.

Sin que ni siquiera te des cuenta, sin proponértelo.

Simplemente nace y así como un día el amor llega a tu vida.

También un día se va sin avisar.

Por eso cuando al fin llega a tu vida, colmando de de las mayores alegrías.

Debes valorarlo y vivirlo a plenitud, sin temores, sin reservas, sin excusas.

Abriendo las puertas de tu corazón.

El amor es la experiencia más maravillosa que podemos experimentar y disfrutar en la vida.

Si se cruza por tu camino... no lo dejes escapar.

Como añoro…

Como añoro tu ausencia.

Como pierdo la paciencia.

Por no tenerte a mi lado.

Creo en cosas increíbles.

Amo cosas reprochables.

Siento hechos incitantes.

Por no tenerte a mi lado.

Quiero que me ames.

Quiero dejar de amarte.

Quiero no saber nada.

Por no tenerte a mi lado.

Mi mundo es un paraje.

Mis sueños son eternos.

Por no tenerte a mi lado.

Me vence la ignorancia.

Me demuele la sapiencia.

Y muero entre tus ojos.

Para así poder tenerte a mi lado.

¿Cómo decirte…?

¿Cómo decirte que mi corazón sangra?

No sé como…

Que este amor me está consumiendo.

Que de verdad amor yo te amo.

¿De qué manera explicarte?

Que este amor me duele.

Tal vez pensamos siempre diferente.

Lo que para ti es negro.

Para mí es blanco.

Si a ti te gusta el Norte.

A mí me gusta el Sur.

Pero aún así este corazón te ama.

Quizás siempre soné.

Imagine un amor muy grande.

Tal vez no sabes amar.

Como yo había imaginado.

Y yo cegado por un amor bonito.

Se me cegó la razón, no quise entender.

Que tú no sabes amar como yo amo.

Lo que se ama, se cuida, se protege.

Y en el amor se es uno.

¿Cómo decirte que mi corazón sangra?

Ya no quiere creer más en el amor.

Esta fue su última experiencia.

Hoy mis besos se disuelven en el aire.

Y mis versos vuelan sin retorno.

Nuestro castillo que con tanto amor los dos construimos.

Más allá del sol, cerquita del cielo muere de tristeza.

Como quisiera ser…

Como quisiera ser viento.

Para llegar hasta ti.

Rozando tu cuerpo acariciando tú pelo.

Y junto a tu boca morir.

Como quisiera ser viento.

Y estar allí siguiendo tus pasos hasta verte dormir.

Pero tan solo soy hombre.

Y debo sufrir el pasar de los días para llegar hasta ti.

Como quisiera ser viento.

Y junto a tu boca morir.

Te amo, princesita de tierras lejanas.

Como quieres que te saque de mi mente…

Volteo a ver el mar y en el veo tu reflejo.

Volteo a ver el cielo y en el veo tu rostro.

Volteo a ver la luna y recuerdo tu hermosura.

Volteo a verme a mí y te veo en mis ojos porque eres parte de mí.

Tantas cosas que pasamos y retos superamos.

Tantos momentos juntos que con amor creamos.

Tantas experiencias unas buenas y otras malas.

Tantas noches, tantos días, muchos llenos de sonrisas.

Como quieres que te saque de mi mente.

Si en mi corazón sigues presente.

Casi ya no aguanto estas locas ganas de ir a verte.

Y llevarte a donde nadie pueda encontrarnos.

Y tenerte solo para mí.

Aquellas noches que abrazados creamos magia en el ambiente.

Aquellas tardes que soñando dibujamos fantasías.

Aquellos días que despertamos con un beso y una sonrisa.

Aquellos años que pasaron como si fueran unos días.

Esos ingratos sinsabores que mucho nos unieron.

Esas malas experiencias que un poco nos apartaron.

Todo aquello que hoy entiendo y que más nos alejaron.

Y ni todo eso pudo ni siquiera separarnos.

Esos juegos que creamos y que juntos disfrutamos.

Las canciones que bailamos y que nos enamoraron.

Los secretos que compartimos y que nos hicieron amigos.

Las cartas que nos enviamos y que ahora atesoramos.

La forma de entendernos y más que nada comprendernos.

La forma de apoyarnos y siempre impulsarnos.

La confianza tan grande que en cada uno depositamos.

Y que nunca jamás defraudamos.

Esa forma de besarnos que prendía fuego a nuestro espacio.

Esa forma de mordernos que inspiraba pasión pura.

Esa forma de amarnos con mucho amor y locura.

Esa forma de querernos tan tierna, dulce y agresiva.

Esas noches que se convirtieron en días.

Esos días que se convirtieron en noches.

Esos momentos que se hicieron recuerdos.

Esos recuerdos que hasta hoy nos unen.

La forma en que convertimos algo simple en memorable.

La forma en que juntos luchamos por nuestro amor.

La forma en que contra viento mar y fuego lo defendimos.

La forma de los sueños que juntos construimos.

Esas veces que haciendo nada hicimos todos.

Esas veces que haciendo todo hicimos magia.

Esas veces que haciendo magia deseamos fuera eterno.

Ese tiempo que quisimos eterno pero paso en un instante.

Esa forma que ahora tienes de decirme que me quieres.

Esa forma que ahora tienes de decirme que me extrañas.

Esa forma en que tus ojos me dicen que regrese.

Esa forma en que tu corazón me pide que no me aleje.

Esa forma en que expresas lo que no quieres que sepa.

Esa forma en que me muestras lo que tienes miedo de mostrar.

Esa forma en que me miras que me muestra la verdad.

Esas lagrimas que sueltas que me indican me haz de extrañar.

El futuro que tendremos si nos volvemos a unir.

Lo felices que seremos si nos das la oportunidad.

Lo maravilloso que la vida será cuando volvamos.

Lo más dulce, lo más tierno, lo eterno, el amor.

Cierro los ojos…

Cierro los ojos y me imagino un mundo.

Donde tan solo con soñar las cosas se hacen realidad.

Donde tan solo con un suspiro le digas a alguien que lo amas.

Donde tan solo con una mirada pidas un beso.

Y con un dedo des una caricia tan suave y tan intensa como hacer el amor.

Donde el soñar, imaginar, amar, y querer sean lo mismo.

Donde un suspiro, una mirada, una caricia, y un beso te hagan sentir la persona más feliz sobre la tierra.

Y que el suspiro llegue a tu corazón.

La mirada toque tu alma.

Mi caricia cobije tu piel.

Y mi beso... que nunca nadie lo pueda borrar de tu alma, tu cuerpo y tu corazón.

¿Cómo olvidarte?

¿Cómo olvidarte?

Aun no lo sé.

Porque ya perteneces a mí.

¿Cómo saber que fuiste mía?

Tampoco lo sé.

Porque contigo pasé momentos que nunca podré olvidar.

Aunque también se que nunca me amaste.

Que solo fingías alegrías para no sentirte sola.

Pero a pesar de todo.

Te agradezco los momentos en los cuales mentías para que yo me sintiera amado.

Aunque en la realidad tu corazón nunca me perteneció.

No sé.

Si odiarte o amarte.

Te odio.

Porque ya no estoy contigo.

Te amo.

Porque te extraño.

Pero si sé.

Que me haces falta.

Porque aun…

A pesar de todo.

Mi corazón todavía te pertenece.

Dignidad de hombre…

¿Qué es eso?

Ya no la conozco.

Contigo la perdí.

Porque me humillé ante ti.

Para pedirte perdón.

Cuando en realidad no tenía porque hacerlo.

Ahora sabes cómo me siento.

Después de expresarte todas estas líneas.

Me siento bien.

Porque escribiendo todo esto…

Dios entró a mi corazón.

Y me hizo saber.

Que él hace su voluntad en mí.

Porque me dará algo mejor solo tengo que esperar.

¿Cómo olvidar?

¿Como olvidar amor?

Aquello momentos maravillosos.

Esa historia sin fin.

Que se quedaran grabados.

Para siempre en nosotros.

Cómo olvidar ese beso dulce.

Sublime que unió nuestras almas.

Besos esculpidos en mi piel.

Cómo olvidar amor.

Tus manos tiernas.

Acariciando mi corazón, mi alma.

Tu aliento tibio en mi rostro.

Cómo olvidar amor.

El amor que me profesas.

La confianza que me guardas.

El concepto en que me tienes...

Como olvidar tus palabras.

Que me esfuerzan a seguir adelante.

Construir mi propio jardín en mi alma.

Cómo no inundar mi alma de alegría.

Gritar al mundo entero que te amo.

Que soy inmensamente feliz.

Y quiero quedarme para siempre a tu lado.

Como olvidarte princesita de mi corazón.

Dime amor....

¿Cómo olvidarte?

Cada amanecer…

Cada amanecer con alegría.

Si tú misma eres como un día nuevo.

Como no sentirme feliz.

Si tú rondas en el aire.

Eres el calor del sol de cada mañana.

Porque solo tú supiste con tu mirar.

Despejar la sombra que dejo la soledad.

Así llenaste mi corazón.
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