Mostrando las entradas con la etiqueta (T). Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta (T). Mostrar todas las entradas

Tú desamor es tan grande que mi corazón…

Tú desamor es tan grande que mi corazón melancólico se apaga poco a poco.

Y mi alma vuela hacia un rumbo oscuro y perdido.

Perdido en la nada.

Y oculto a cualquier luz.

No puedo dejar de sentir dolor… no puedo.

No puedo dejar de vivir y morir en un mismo instante.

Es imposible controlar algo que es tan profundo como el mar.

Y tan eterno como el tiempo.

Es mi vida tan vacía sin mis sueños.

Y tan opaca sin tu luz.

Y a ti no te importa y yo lo sé.

Y lo siento y no puedo aborrecerte.

Cada golpe al corazón que tú me das me mata un poco.

Pero jamás has podido lograr que te deje de amar.

Mira mis lágrimas y compadécete de mi dolor.

Déjame volar solo.

Sepárate completamente de mi camino.

Olvídame sin amarme y húndete en tu mundo.

Se feliz y regálame mi instante...

Tenme un poco de compasión.

Y ten el suficiente valor para huir completamente de mi vida… por favor.

Tengo un gran dolor…

Tengo un gran dolor que me quema el alma.

Y una gran muralla que me oprime el corazón.

En mis ojos ya no quedan más lágrimas.

Que surquen mis mejillas, dándole alivio, a este tonto corazón.

Que no entiende de razones.

¿Por qué esa dulce ilusión que me daba vida se me ha desvanecido como una sombra amarga?

No puedo con este dolor y esta agonía en el alma.

Mis versos carecen de su acostumbrada alegría.

Ya no alcanzo el cielo como antes con mis manos.

Esta tarde se empañó mi vida.

Con la sombra de un presentimiento.

Y un temor se me asentó en el alma.

Ella no era sincera, lo descubrí hoy.

Y mi mundo se vino abajo.

Hoy solo de dolor se viste mi alma.

Todo cambia en la vida…

Todo cambia en la vida… todo, todo.

Se hace débil aquel que era tan fuerte.

Hoy puedes tú de amor sentirte mareado.

Desear mañana, de dolor, la muerte.

Oh, extraña vida, alquimista implacable.

Que conviertes el gozo en sufrimiento.

Que tornas en insomnio el sueño amable.

Y en feroz huracán el suave viento.

Yo que soñaba pensando en el mañana.

Hoy sólo lloro pensando en el ayer.

Pues mi hermosa ilusión se tornó vana.

Lo bueno y grato haciéndose muy cruel.

¿Qué no podrá el llanto que era risa, sufrir una vez más otra transformación?

A un ciclón yo vi volverse brisa.

¡Pluguiera a Dios brindarme otra ilusión!

Te amo así…

Te amo así, sin pedir nada.

Estas tan lejos de aquí pero muy dentro de mí.

Metida en cada rincón de mi alma.

Eres la dueña absoluto de mis deseos.

Y controlas muy bien mis voluntades.

Eres como el torrente de sangre.

Que corre a través de mis venas.

Y me da la fuerza y la energía.

Para poder vencer y vivir cada día.

Cuando te paseas en mis pensamientos.

Un caudal de ternura de mi se desprende.

Y puedo ver en tus ojos tristes.

Un río manso, apacible, cargado de ti.

Cuando sonríes se dibuja en tus labios.

Un cielo azul llenito de estrellas.

Y cuando extasiada me miras.

Me sonrojas también me provocas.

Te amo así, sin pedir nada.

Tan solo me conformo con haberte tenido.

Y haber soñado contigo en tus brazos.

Estas tan lejos de aquí pero muy dentro de mí.

Te amo, princesita de tierras lejanas…

Te amo…

Porque de tierra estás hecha.

Porque eres fruta deseada.

Y en mi universo infinito.

Eres mi estrella dorada.

Te amo…

Porque de luna es tu pelo.

Y es de sol tu busto tierno.

Porque el volcán de tus besos.

Son el camino a lo eterno.

Te amo…

Porque eres mi alma gemela.

Destello de mi alborada.

Canción de cuna bordada.

En los hilos de mi almohada.

Te amo…

Porque has sembrado sin miedo.

En los surcos de mi piel.

Germen de trigo bendito.

Fruto del amor más fiel.

Por eso mi dulce bien.

Cada vez que te pienso o llamo.

Sea por mal o por bien.

Tan solo sé que… te amo, princesita de tierras lejanas.

Te amo con la inmensidad…

Te amo con la inmensidad de las montañas.

Y con la profundidad de un río.

Con el sonido de un eco.

Y con el susurro de mis suspiros.

Te amo con la fuerza de una tormenta.

Y con la debilidad de una garúa.

Con el fuego de un volcán.

Y la quietud de una noche serena.

Te amo al principio y al final del día.

Y continúo amándote.

En mis sueños y en mis fantasías.

Te amo con el rojo de una rosa.

Y con el azul del cielo.

Con la ternura que inspira un recién nacido.

Y con la furia de un mar embravecido.

¡Cómo no amarte!

Si cada uno de mis sentidos.

Están puestos en ti.

Y te amo con toda mi alma.

Cómo no amarte como te amo.

Si estás en cada poro de mi piel.

Si este amor recorre mis venas.

Si tu amor me llena de vida.

Tú me dijiste…

Tú me dijiste que me amabas.

Y mi vida cambio de repente.

No me importo el decir de la gente.

Pues solamente en ti pensaba.

Pero hace tiempo que sospechaba.

Que la gente no era diferente.

Y pensando en ti, constantemente.

Descubrí que eras lo que soñaba.

Hoy siento miedo del futuro.

Porque sin ti, no soy consciente.

Porque contigo, fui maduro.

Pero a pesar de lo que sientes.

Mi corazón no esta seguro.

De que le ames, eternamente.

Te he vuelto a ver…

Te he vuelto a ver.

Ya no sé si es felicidad o contrariedad.

Recuerdo cuando juntos estábamos.

Nos amábamos de una forma loca.

Yo te regalaba las estrellas.

Y hacíamos de la noche algo especial.

Recuerdo que nos prometíamos amor.

Que esto no era un sueño.

Acariciaba tu cuerpo y te besaba.

Mientras decía que te amaba.

Pero me habían dicho.

Que no volvería a verte.

Y ahora te veo.

Mi corazón me pide que este junto a ti.

Sé que tu también sientes lo mismo.

Pero parece que el mundo nos quiere separados.

Yo te amo como a nadie.

Sufro por saber que no estás a mi lado.

Que alguien nos separo…

Pero ahora no puedo regresar aunque te ame.

Siento como mi alma se desmorona al saber que pudiste estar a mi lado.

Te dejo libre sin que sepas que vivo para que seas feliz.

Te amo, princesita de tierras lejanas.

Te amo en lo más profundo de mi alma…

Te amo en lo más profundo de mi alma… de mí ser… de mi vida.

Te amo como no ame nunca.

No conocí el verdadero significado del verbo amar.

Hasta que llegaste a mi vida.

Te amo… más allá de la pasión y de los sentimientos.

Recorriendo el verbo amar en cada instante.

Saboreando tus labios.

Te amo cada día… cada instante… cada pensamiento… cada palabra.

Te amo en mi recuerdo… en tu presencia.

Te amo en mi añoranza de ti.

Te amo sin pedirte nada a cambio.

Simplemente te amo.

Y aunque tú no me amares.

Yo te seguiría amando eternamente igual.

En fin… te amo.

Y cualquier palabra no podría expresar este sentimiento.

Lo comprobarás... amándome.

Te deslizas sobre mí…

Te deslizas sobre mí como una flor helada.

Pétalo dorado.

Incubas en mi cuerpo tu dolor más tierno.

Frágil capullo.

Te sientas sobre el polvo de mi corazón.

Presientes que algo no anda bien.

Tu cuerpo entero sin piel.

Me vuelve noche.

Me vuelve hombre.

En la raíz de tu alma hay una herida.

Que desvanece.

Pero no duele.

En los suburbios de mi pecho hay un amor.

Amor fingido y destruido.

Te busco...

Te busco en cada gota de lluvia que cae del cielo.

En cada rosa de esta primavera.

En cada suspiro de un enamorado.

En cada capullo en flor.

Te puedo ver a través de mis sueños.

Con tu rostro suave y fresco.

Al igual que las rosas de mi jardín.

Observo tu mirada y ella me confunde con el resplandor del sol.

Te amo y al ver llover no estás.

Te necesito...

Quiero compartir este momento contigo.

Desde una simple lluvia de primavera hasta mi vida misma.

Te amo mujer...

A pesar de la distancia que nos separa.

Eres lo único en que pienso.

Eres el mar de mis sueños.

En él te encuentro en cada ola.

En su espuma que acaricia mi cuerpo.

Eres mi sirena que se acerca a la orilla de mis sueños.

Y se convierte en una bella y hermosa mujer.

Por supuesto eres tú.

Te amo…

Te amo por ser quien eres.

Por cómo me tratas.

Por brindarme el apoyo que necesito.

Por estar conmigo cuando otros no lo han estado.

Por decirme te amo cuando necesitaba de un cariño.

Por escucharme cuando tengo algo que decir.

Por ignorar aquellos defectos que vez en mi y por resaltar aquellas virtudes que tengo.

Por seguirme en el camino aunque se vea oscuro y por poner la luz en ese camino.

Por hacerme creer que todo va a estar bien.

Por creer en mí.

Por hacerme entender las cosas y sacarme de mis errores.

Por luchar tanto por mí y llamarme cuando me sentía tan solo.

Por levantarme cuando estoy triste.

Simplemente te amo por existir.

Gracias amorcito.

Te necesito en mi vida…

Te necesito en mi vida para ser feliz.

Porque el sonido de tu voz alegra mi espíritu.

Y tu cercanía despierta todos mis sentidos.

Te necesito para disfrutar mi vida.

Porque contigo las horas parecen minutos.

Y cada minuto es un tesoro para mí.

Te necesito cada día a mi lado.

Porque tú presencia renueva mi interior.

Y hace que crezcan mis sentimientos hacia a ti con mucho mas fuerzas como jamás antes conocí.

Te necesito en mi vida para ser feliz.

Porque no tengo la menor duda que tu eres la otra parte que le falta a mi vida para ser completamente feliz.

Tú eres el espejo…

Tú eres el espejo en el cual me miro.

Porque cuando miro a través de tus ojos…

Sé que puedes ser feliz con nuestro amor.

Y que con tu felicidad, la mía crece y se multiplica.

Mirando a través de ti puedo ver sentimientos puros.

Puedo saborear tu aire.

Puedo hasta bailar sin despertar de este sueño.

Porque cuando te miro no me conformo con mirarte.

Deseo abrazarte para estar en ti.

Y también quiero conservar tu imagen como una fotografía en la que tu eres la luz que ilumina mis días.

No me canso de reflejarme en ti.

Porque te conozco pero quiero conocerte más.

Y por mirarme te sigo conociendo.

Y conozco nuestro amor.

Y la bendición que tengo de amarte.

Déjame que me siga mirando en ti.

Tú eres mi espejo y la persona que refleja mis emociones.

Quién es motivo de sentimientos y de placeres.

Tú eres mi espejo y por eso no dejo de mirarte.

No dejo de pensarte.

Y no dejo de amarte.

Te necesito…

Te necesito, porque haces que mis ojos brillen con la intensidad de dos estrellas al ver dibujado el horizonte trazado para los dos.

Te necesito, porque haces que mi corcel dance al compás de tu melodía.

Esa melodía tan tuya como mía.

Te necesito, porque haces que mi boca dibuje una sonrisa que evoca la magia de los vientos y los mares para transformar un ser en alguien capaz de defender lo que ama.

Te necesito, porque haces que mis manos toscas sean capaces de acariciar tu cuerpo con la suavidad de la brisa del mar.

Te necesito, porque haces que mi cuerpo se estremezca con la fragancia de tu ser.

Y hace que nuestros cuerpos se desborden en una comunión que muy pocos conocen.

Pero que todos quisieran conocer.

Te necesito, porque tu mirada es aquel horizonte que siempre quise ver.

Tu voz es la melodía que siempre quise bailar.

Tu brazos son aquel abrigo que siempre quise tener.

Tus manos los pétalos que siempre quise que acariciaran mi ser.

Y tu intelecto aquella enzima que se complementa tan perfecta a mí.

En resumen…

Tu vida es aquel libro que siempre desee leer.

Pero lo más curioso es que busco en librerías conocidas y desconocidas pero no te encuentro.

¿Por qué?

Te pienso amor...

Te pienso amor e imagino que eres el viento.

Rozas mi cara, mis manos.

Tocas todo mi cuerpo.

Y en su ruido apacible puedo sentir tu aliento.

Te pienso amor e imagino que eres mi silencio.

Te siento apacible, callada.

No dices absolutamente nada.

Me acaricias con la mirada.

Me recorres de arriba hacia abajo.

Con tus apasionados ojos negros.

Te pienso amor y mi alma vuela apresurada.

Atravesando mares y desiertos.

Y nuestras almas se encuentran.

En la calle de los sueños.

Buscamos un lugar secreto.

Donde darle rienda suelta a nuestros ansiados sueños.

Me besas, me rozas, me tocas.

Me alborotas, me vuelves loco.

Te pienso amor…

Quiero decirte que te extraño.

Te amo, te deseo y te recuerdo.

Que en nosotros jamás existirán distancias, ni edad, ni tiempo.

Ambos sabemos de la profundidad de nuestros sentimientos.

Te quiero así…

Te quiero así, así sin pedir nada.

Te quiero así, con este amor.

Lleno de nostalgias.

Con el corazón lleno de emociones.

Te quiero con lágrimas de ausencia.

Con anocheceres llenos de llanto.

Y amaneceres llenos de esperanzas.

Te quiero tal vez sin medida.

Aunque mi corazón no sabe de razones.

Ungiste con ungüento de tu amor a mi alma.

Cuando esta estaba solo y agonizaba.

Curaste mis alas mortalmente heridas.

Me enseñaste a volar.

A volar bien alto.

Me tomaste de la mano y viajamos juntos.

Te quiero, te quiero pero no te pido nada.

Tal vez nunca llegarás a entender.

Que mi amor por ti es muy grande.

Que vivirás para siempre en mí.

Te espero esta noche.

Allá, allá donde nos conocimos.

Donde dos almas se juntan.

Y libremente se aman.

Te quiero…

Te quiero porque te quiero.

Desde el mismo día que te conocí.

Fue como un ritmo alegre.

Que ingresó a mi vida.

Te quiero como eres.

Te quiero porque llenas mi vida de un profundo perfume de rosas.

Sí, te quiero.

Y te pido perdón.

Porque eres ese ser.

Que todo hombre desea.

Sí, te quiero.

Y te deseo cada día.

Pues eres esa estrella blanca.

En un firmamento azul profundo.

Como tu dulce mirada.

Te quiero como joya preciada.

Que este ser humano.

Sabe que jamás podrá tenerte en su mano.

Pero te llevo tan profundo en mi corazón.

Hermoso valor de mujer.

Simplemente, por eso te quiero.

Te recuerdo a menudo…

A menudo te recuerdo.

Con cualquier excusa vienes a mi mente.

En cualquier momento del día.

Hasta cuando duermo te metes en mis sueños.

Sí, a menudo te recuerdo.

¿Cómo no voy a hacerlo?

¿No recuerdan a los héroes sus glorias y les escriben leyendas?

Pues yo te recuerdo a ti y te escribo cartas.

Porque tú eres mi gloria.

Te recuerdo en mil momentos.

Y vuelvo a disfrutar cada uno de ellos.

Y los echo de menos.

Y sueño, siempre sueño.

Quiero volver a disfrutar del tiempo contigo.

Pero mientras tanto, te recuerdo.

Tengo el alma vacía…

Tengo el alma vacía.

La sonrisa caída.

El andar pesado.

La mirada ausente.

El ánimo cansado.

El corazón sin grandes ni pequeñas ilusiones.

La mente sin ideales.

Y ciertas metas con sabor a tiempo perdido.

Tengo las manos inútiles.

Las esperanzas estériles.

Y el amor sin el ser amado.

Las ilusiones aburridas.

Los sueños decaídos.

Y las ansias sin ansias de más.

No estoy solo.

Mi corazón late sin causa ni motivo.

Hay algo que falta.

Algo que no he conseguido.

Yo sé lo que es reír sin ganas.

Sonreír por compromiso.

Y llorar por nada.

He querido valorarme por lo que soy.

Y no por lo que he dado.

Y he dado poco.

Y no soy lo que esperaba.
Return top