Siempre soñé con una persona llena de fe, inteligente, amable, cariñosa, comunicativa, respetuosa, honesta y sobre todo sincera.
Pero dicen que los sueños, es el reflejo de los deseos.
Y este era un gran deseo y mi mayor sueño.
Lo soñé tan real y tan perfecto que ya formaba parte de mi vida.
Entonces pensé…
¿Cómo y dónde encontraría una persona con estas cualidades tan especiales?
¿No creo que exista alguien tan perfecto?
Hasta que apareciste en mi vida.
Así tan rápido, repentino…
¿Y sabes qué?
Llenaste y sobrepasaste todas mis expectativas.
Eres la persona que siempre he soñado.
Esa persona perfecta, perfecta para mí.
Y lo mejor es que eres más que un sueño, eres mi mundo, mi vida, mi realidad, eres mi todo.
Gracias a Dios por haberte enviado a mi vida, por existir y vivir y no solo en este mundo, sino en mi vida, en mi corazón y en mi alma.
Return top
0 comentarios:
Publicar un comentario